Se podía leer a finales del mes de febrero: se incrementa el número de sacerdotes y fieles católicos en el mundo, según el Anuario Pontificio 2010.
Crece la cifra de católicos en el mundo (1.166 millones), así como la de obispos, sacerdotes y seminaristas, especialmente en Asia y África. El clero en Europa en cambio disminuye. Así se desprende del Anuario Pontificio 2010 presentado al Papa. El volumen permite apreciar algunas novedades relativas a la Iglesia católica a partir de 2009.
La situación numérica de los sacerdotes -tanto diocesanos como religiosos- sigue mostrando una evolución positiva pero moderada y según el nuevo Anuario 2010: los sacerdotes, diocesanos y religiosos aumentaron en el curso de los últimos nueve años, mientras la distribución del clero entre los continentes, tomando como muestra el año 2008, está caracterizada por una fuerte prevalencia de sacerdotes europeos.
Jesús Domingo Martínez