El Consejo de la Juventud de España está presidido por Lucía Sala, una joven representante de las Juventudes Marianas Vicencianas, que presume de pasearse como Pedro por su casa por la Conferencia Episcopal. Además, estuvo presente en el encuentro con los jóvenes de Juan Pablo II en Cuatro Vientos. Pero a Sala le gusta el doble juego. Mantiene estrechas relaciones con el PSOE y con el mundo homosexual. Colabora con el Gobierno en el programa de lucha contra el hambre Alianza contra la pobreza y con Zerolo -el del amor irrecurrible- en la causa homosexual.
El caso es que a Lucía Sala se le ha ocurrido una brillante idea a la que aplicar el dinero público y las multinacionales del látex ya se frotan las manos. El último acuerdo : gastar 75.000 euros (del dinero de los contribuyentes) en el reparto de 675.000 preservativos. Además, el Consejo ha apoyado la Ley de matrimonio homosexual y la manifestación del orgullo gay, todo un ejemplo de coherencia de su presidenta Lucía Sala. Además, varias asociaciones de gays y lesbianas han desembarcado en el Consejo de la Juventud de Madrid. La Asociación Entiendes Madrid se ha instalado incluso en la Comisión Permanente.