Para el cobro del paro de los autónomos hay que estar inscrito al menos durante un año, aunque los plenos efectos surten a los tres años de cotización. Y no vale la cotización ordinaria, la mínima, no. Hay que cotizar por accidentes del trabajo y enfermedades profesionales. Algo obligatorio para los autónomos dependientes y voluntarios para el resto.
Por eso, el supuesto derecho de paro no tendrá coste alguno para el presupuesto ni para la Seguridad Social. Preguntada sobre esta cuestión, la vicepresidenta ha empezado a hacerse un lío, explicando que dependerá de cuántos coticen y de cuántos pasen a la situación de cese involuntario. Por supuesto. Pero la Seguridad Social tiene sus cálculos actuariales y sabe que la medida tendrá coste cero para sus cuentas. O sea, una tomadura de pelo.