El FMI ha elevado las previsiones de crecimiento para España al 1,2 % para este año y al 1,6 % para 2015, frente al 0,9 % y el 1 %, respectivamente, calculados en abril.
Con ser importante lo cuantitativo, lo es más aún lo cualitativo plasmado en la reflexión del Fondo: "España ha doblado la esquina, la recuperación va bien encauzada y las perspectivas son mejores que hace un año gracias a los esfuerzos de la sociedad y las medidas adoptadas".
Parece imposible no compartir el análisis de un organismo que no regala adjetivos. Estas palabras dan motivo para el optimismo.
J. D.