"El hospital lugar de evangelización: misión humana y espiritual" era el título del congreso organizado por el Pontificio Consejo para los Operadores Sanitarios.
Es decir, el departamento del Vaticano que se encarga de coordinar la atención sanitaria en las más de 120.000 estructuras que la Iglesia católica tiene en el mundo entre dispensarios, ambulatorios y hospitales, los miles de personas que trabajan en ellos y, especialmente, de los enfermos que pasan en esos hospitales algunos de los momentos más difíciles de sus vidas.
Es su manera particular de subrayar la importancia que los médicos que trabajan en centros católicos tienen dentro de su plan para la Nueva evangelización, en palabras de Juan Pablo II, en el "Apostolado de la Misericordia" que se desarrollan en esos hospitales que desde el más grande policlínico católico hasta el pequeño dispensario rural están unidos por la especial atención y relación entre el paciente y el agente sanitario, que no sólo se preocupa de curar las heridas del cuerpo, sino también las del alma
Valentín Abelenda Carrillo