El Príncipe Felipe ha inaugurado el Año Santo Jacobeo con un discurso centro-reformista. Afirma Su Alteza que Santiago es un elemento integrador. Se le olvida al "hereu" de sus Majestades Católicas que Santiago además es centro de atracción espiritual y lugar de peregrinación de la Europa cristiana desde hace siglos.
A la Conferencia Episcopal de Unión Europea no se le olvida y ha organizado una peregrinación del 17 al 21 de abril próximo. A ella asistirá el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi; el presidente del Parlamento Europeo, Pat Cox; y la presidenta de Letonia, Vaira Vike Freiberga. Se trata de revivir el espíritu de peregrinación del pueblo cristiano europeo en los días previos de la ceremonia de integración de los 10 países del Este a las instituciones europeas.
Toda una apuesta por la defensa de las raíces cristianas de Europa cuando la masonería belga y francesa presionan por la supresión de la mención ontológica en el Preámbulo de la Constitución Europea. ¿Qué es Europa? ¿Hija de la Ilustración? ¿Un ente administrativo que regula el cumplimiento de las macromagnitudes? No, Europa es Santiago. Y Santiago es "integración" en la fe en un mismo Jesucristo, Hijo de Dios y Salvador.