El Papa al dirigirse a los 32 miembros de la Comisión Teológica Internacional, al término de los trabajos de su Sesión Plenaria anual, y tras destacar su aprecio por el Mensaje que han redactado con ocasión de este Año de la fe, en que pone de manifiesto el modo específico con que los teólogos, sirviendo fielmente a la verdad de la fe, pueden participar en el impulso evangelizador de la Iglesia.
El Pontífice afirmó asimismo que cuando se niega la posibilidad para todos de referirse a una verdad objetiva, el diálogo se vuelve imposible y la violencia, declarada o escondida, se convierte en la regla de las relaciones humanas.
A la vez que destacó que sin la apertura a lo trascendente, que permite encontrar respuestas a los interrogantes acerca del sentido de la vida y del modo de vivir de modo moral, el hombre se vuelve incapaz de obrar según la justicia y de empeñarse por la paz.
Jesús D Mez Madrid