La entidad no acepta que sea una capitalización de deuda, pero lo cierto es que podría aflorar con un 2% del accionariado

Otros acreedores bancarios se niegan. En cualquier caso, la banca está salvando a Juan Luis Cebrián y a los Polanco de una quiebra segura.
Fuentes del Santander han comunicado a Hispanidad que, el banco, primer acreedor español, entrarán en el grupo PRISA, a través de la operación Liberty. Eso sí, dichas fuentes aseguran que no se puede hablar de una capitalización de deuda, dado que se trata de una inversión vía Liberty, en la que también participa, por pura casualidad, el primer acreedor extranjero. Entre los españoles, tras Santander (con Banesto, que también figura) los acreedores son Caixa, Caja Madrid y Popular.

Ocurre que Liberty más que una empresa es un a modo de UTE, cuyo único objeto social consiste en tomar una participación que, finalmente, podría alcanzar el 65% del capital de PRISA. Con ello, los Polanco quedarán en minoría y el consejero delegado, Juan Luis Cebrián, conseguirá su propósito de hacerse con los mandos de un imperio en ruinas pero que todavía posee influencia necesaria para doblegar voluntades. Al final, según las precitadas fuentes, estaríamos hablando de una participación de Santander-Banesto próxima al 2% del capital de PRISA.

En cualquier caso, estamos ante un nuevo favor de la banca a un grupo en quiebra técnica, con una deuda próxima a los 5.000 millones de euros y que se niega a perder poder vendiendo activos rentables, como la editorial Santillana, en la convicción de que ningún banco se atreverá a instar el concurso de acreedores. Hablo de nuevo favor por cuanto ya le concedieron la congelación, hasta 2013 de la amortización del crédito sindicado por valor de 1.850 millones de euros con los que se gestó la absurda OPA sobre Sogecable, una sociedad que ya controlaban.

Cebrián se niega a vender activos, pero está claro que Liberty sí va a hacerlo. A pesar de que exigió reducir a más de la mitad la valoración de las acciones de PRISA lo cierto es que la única manera de rentabilizar su inversión es ésa: trocear el grupo con la venta de activos. Al final, como ya hemos informado, la idea es quedarse con El País (y desarrollar el relevo de www.elpais.com) y con la editorial Santillana. De vuelta a la Galaxia Guttemberg.

En cualquier caso, la banca está salvando a Cebrián y a los Polanco (que aún así pierden el control) de una quiebra segura. O sea, lo mismo que hacen con el panadero de la esquina.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com