Alfredo Sáenz: nadie ha venido a pedirnos dinero para Fenosa. Joan-David Grimá no representa al Santander en ACS
El rumor durante la mañana del martes 29 en la City madrileña era que el Santander iba a entrar en la subasta abierta por ACS para vender su paquete del 45% al mejor postor. Naturalmente, como intermediario, que ya en su día, como dice el consejero delegado del grupo, vendieron Fenosa a Florentino Pérez.
Pero no, Alfredo Sáenz niega que alguien se haya acercado para pedir créditos con los que comprar Unión Fenosa. Si vienen, les escucharán con gusto. Por tanto, el comprador tipo continúa siendo Gas Natural, con los franceses de Suez incordiando.
Por cierto, que Sáenz se niega a especificar qué riesgo tiene el Santander con los constructores metidos en empresa energéticas, y eso que el banco de Emilio Botín ha estado en casi todas las operaciones: Sacyr en Repsol, Entrecanales en Endesa, Florentino en Fenosa... Eso sí, aclara que, desde diciembre el riesgo no ha aumentado en un solo euro, es decir, que no ha refinanciado ni a ACS ni a Sacyr ni a Acciona.
Eso sí, confiesa un riesgo "mínimo" con promotores inmobiliarios -16.800 millones de euros-. Ahora bien, por vez primera, el banco confiesa lo que ya anticipara Hispanidad, que tanto el Santander como Banesto están comprando pisos a inmobiliarios prestatarios, metiéndose a ladrilleros para intentar evitar el fallido. En palabras de Sáenz: "Compra de inmuebles para reducir riesgo y revenderlos, en beneficio mutuo, de los acreditados y del propio Grupo". ¿A que se le entiende todo?
Por cierto, Sáenz aclara que la presencia de Joan David Grimá en el Consejo de ACS es "marginal", producto de la compra de Dragados al banco por parte de Florentino Pérez. En ningún caso, "representa al Santander en el Consejo de ACS, quiero que eso quede claro". Sabiendo de la amistad entre Pérez y Sáenz la aclaración resulta pertinente.
Por lo que respecta a los resultados del primer semestre, hay que aclarar que el banco de Botín ha presentado, y no es lo habitual, un semblante más risueño que su directo competidor, el BBVA de FG. Además, la Bolsa le trata mucho mejor.
Y si de comparaciones hablamos, el BBVA continúa con la nefasta política de prejubilaciones, mientras el Santander ha terminado con ella.
Con las prejubilaciones, que no con las oficinas franquiciadas, que parecen sucursales del Santander pero pertenecen a un particular con trabajadores que trabajan lo mismo que los del Santander... pero en peores condiciones laborales.