La fermentación y destilación de algunas plantas para la elaboración de bebidas etílicas, que producen euforia, ha sido una constante en la cultura hispanoamericana. Los néctares alcohólicos son la droga legal que más se dilapidada.

Las secuelas que produce el derroche de bebidas etílicas, por un tiempo prolongado, son muchas y muy graves. Se comienza por la adicción y se  llega a una fase sin retorno; el desenlace final. Sin embargo, es posible la rehabilitación, con denuedo y un tratamiento adecuado. Por lo tanto, la ingesta desmedida de bebidas espirituosas, hace daño al cuerpo, a la vida social, familiar y profesional.

Cuanto más largo sea el tiempo y con más intensidad el abuso del alcohol, de alta graduación, ingerido mayores son las secuelas. Los problemas más graves son la Cirrosis Hepática y el "Cerebro Húmedo" que se producen después de unos 15 años derrochando bebidas etílicas.

Según la Encuesta Sobre Alcohol y Drogas, situada dentro del Plan Nacional sobre Drogas, el 3,4% de los encuestados dilapidan bebidas etílicas de gran riesgo. En la Unión Europea, el usuario considerado como abusivo es Irlanda, es decir, el de mayor número de consumidores inmoderados y Bulgaria el del menor número de consumidores abusivos. 

Se ha llevado a cabo una campaña a la que el sector etílico ha destinado más de un millón y medio de euros. Esta acción se une a otras iniciativas del mundo de las néctares espirituosos para el consumo responsable y, al mismo tiempo, un cambio en el eslogan a todas las bebidas de alta graduación.

Con el eslogan, "bebe con moderación, es tu responsabilidad", se ha intentado vigorizar las conductas y sugerir la exigencia individual en la dilapidación de bebidas alcohólicas. El usuario se caracteriza por un derroche etílico social y ejecutado en los albergues turísticos, en el que se acumula el 82% del consumo. Este tipo de consumo alcohólico, que tiene un enfoque lúdico, se le llama patrón nórdico, identificado por una ingesta de néctares alcohólicos mucho más compulsiva.


El alcoholismo afecta más a las mujeres que a los hombres ya que, la atrofia en el cerebro se desarrolla en ellas de una manera más rápida, según un estudio de la Universidad alemana de Heidel y de la norteamericana de Stanford.

Las bebidas espirituosas son el ataque más grave que sufre la sociedad actual. Un ataque cuyas consecuencias alcanzan a todos los estamentos pero del que son especialmente víctimas los adolescentes.
 

Clemente Ferrer
clementeferrer3@gmail.com