Los nacionalistas se han excitado tras la sentencia del Tribunal Internacional de La Haya aprobando la independencia de Kosovo. Y eso a pesar de que expresamente se ha respondido que se trata de una cuestión excepcional y que no es aplicable a Cataluña y País Vasco. Por supuesto, el Gobierno español sigue el mismo argumento. No tiene nada que ver España con los Balcanes, una región que vivió el conflicto más cruento desde la segunda guerra mundial y que ha escrito las páginas más negras del continente. Si es que, cuando se pone poetisa... Añade que la prosperidad y las normas de convivencia españolas no tienen nada que ver con la excepcionalidad que se ha vivido en los Balcanes.
¿Asunto cerrado? No tanto. Porque los nacionalistas podrían argumentar que jurídicamente existe el antecedente de Kosovo. ¿Y entonces? Hay debate jurídico. No está tan claro. Es lo que explica la excitación de los nacionalistas, por mucho que el Gobierno opte por negar la mayor. Sobre todo en público.