Los fabricantes se quejan ante la invasión comercial China
Los fabricantes españoles de calzado, textil y zapatos están que trinan con la avalancha comercial de productos procedentes de China principalmente que destrozan literalmente los mercados nacionales. Son infinitamente más baratos -es la camiseta de un euro de la que siempre habla Rajoy- y no siempre cumplen con los estándares de calidad y seguridad de la normativa comunitaria.
Así que el gobierno ha decidido aprobar buen decreto por el que se refuerzan los controles en las importaciones de estos productos. Un brindis al sol, porque resulta que el espacio único europeo permite que con que haya un solo puerto europeo que haga la vista gorda, las mercancías pueden moverse libremente por todo el territorio. O dicho de otra forma. De nada vale que nosotros frenemos el dique si no lo hacen nuestros vecinos. Y el puerto de Amsterdam es el puerto más laxo de toda la UE. Suficiente. Los chinos lo saben y han encontrado su vía de penetración. Conclusión: El gobierno trata de tapar el sol con un dedo.