No hay duda de que la cooperación social es cada vez un aspecto que las empresas de todo el mundo tienen más en cuenta, pues es su manera de aportar un granito de arena para mejorar la sociedad y además retorna cierto reconocimiento y valor añadido.

La LCF establece sobre vertedero un impuesto especial, que se destina a proyectos sociales

FCC Environment, la filial para el Reino Unido del grupo español de servicios ciudadanos, gestiona los vertederos de este país y a su vez desarrolla diversos proyectos de cooperación social junto a la organización británica sin ánimo de lucro, Waste Recycling Environmental (WREN).

Dichos proyectos se enmarcan en la normativa británica Landfill Communities Fund (LCF), que fue aprobada en 1996 y establece sobre los vertederos un impuesto especial, el cual se destina a proyectos sociales de las comunidades situadas en un perímetro de diez millas de un vertedero.

Gracias al LCF, supervisado por el regulador gubernamental independiente ENTRUST, desde 1996 se han invertido más de 1.000 millones de euros y se han realizado más de 32.000 proyectos, que se han centrado en: la mejora de las infraestructuras de la comunidad, la conservación de la biodiversidad y el patrimonio histórico.

Desde el inicio de la recesión económica se produjo una fuerte contracción de la financiación y por ello una serie de organizaciones británicas para la conservación y regeneración de la comunidad empezaron a acudir cada vez más al LCF como fuente importante de fondos, cruciales para cumplir sus proyectos destinados a mejorar la calidad de vida. Entre ellas estaba FCC Environment, que fue uno de los primeros gestores de vertederos en tomar parte en el LCF, estableciendo para ello el organismo sin ánimo de lucro WREN.

FCC Environment fue uno de los primeros gestores de vertederos en tomar parte en el LCF

El cual ha permitido la aportación de aproximadamente 200 millones de euros a más de 6.700 proyectos en Inglaterra, Escocia y Gales. "Los proyectos pueden aportar importantes mejoras en la calidad de vida de las personas", afirma Mike Snell, responsable de Asuntos Externos de FCC Environment y consejero de WREN durante 13 años. "Estamos orgullosos del trabajo que realiza WREN", añade. "Es importante destacar que WREN ha acumulado una enorme experiencia en la gestión eficiente y la entrega de fondos para proyectos, lo que garantiza que las comunidades reciben el mayor valor posible del LCF", puntualiza Snell.

WREN tiene tres corrientes de financiación específicas. Una de ellas es la comunidad, pues se encarga de mejorar importantes infraestructuras comunitarias en pueblos y aldeas. Otra es la biodiversidad, ya que vela por la conservación del entorno natural en destacadas áreas silvestres. La última es el patrimonio histórico porque intenta preservar edificios antiguos e históricos.

"WREN ha tenido un éxito notable a la hora de atraer solicitudes de financiación de proyectos, y las comunidades más ricas son muy capaces de identificar sus necesidades y participar en el proceso de buscar la financiación necesaria", según cuenta Mike Snell. Pero durante este año ha implantado un cambio radical en su forma de encontrar proyectos para financiar, ya que tras su investigación reciente, ha comprobado que las comunidades más desfavorecidas no necesariamente cuentan con la experiencia o los recursos necesarios para aprovechar la financiación que reciben del mecanismo fiscal de la LCF.

El nuevo programa "Fortaleciendo Comunidades" se está implantando ya en Gainsborough

Ahora afronta esta necesidad con un nuevo programa único de 900.000 euros, denominado "Fortaleciendo Comunidades". El cual se está implantando ya en la ciudad de Gainsborough y si prospera, se podría extender a otras siete áreas de Reino Unido, con un total de 7 millones de euros a repartir. Este programa de FCC trabaja en busca de grandes ideas para mejorar la vida comunitaria de la ciudad inglesa y por ello realiza una serie de encuestas en las que pregunta a la gente qué le gustaría que se desarrollara en la ciudad.

"Este nuevo y emocionante programa representa un enfoque diferente para que organismos ambientales como WREN satisfagan las necesidades de las personas que viven en zonas desfavorecidas. También encaja muy bien con el compromiso del Grupo FCC de ofrecer servicios socialmente importantes -como la gestión de infraestructuras y la gestión de residuos y agua- que verdaderamente mejoran la vida de las personas", comenta Mike Snell.

Cristina Martín

cristina@hispanidad.com