El insulto de Losantos fue comentado el pasado domingo entre las personalidades eclesiásticas que asistieron en Zaragoza a la Consagración de España al Inmaculado Corazón de María, en ceremonia presidida por el presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Ricardo Blázquez. Allí estaban presentes familiares de Fabiola de Bélgica, que hicieron patente su disgusto.
En una carta enviada a Hispanidad y a la plataforma Hazteoir, Mercedes Soto, sobrina de la Reina Fabiola, explicaba que el Rey Balduino no pretendía una abdicación temporal, sino definitiva (Ver carta)
Por cierto, la carta ha sido silenciada por los más diversos medios informativos, dado que Hazteoir la reenvía a 120 medios informativos. Y hay que suponer que dicho silencio no pretendía evitar un feo a FJL, sino a otras más altas instancias que podrían sentirse heridas por el parangón entre el monarca belga y el español. Es sabido que las comparaciones resultan tan odiosas como esclarecedoras.