Francisco González, presidente del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), no se opone a un relevo profesional en la cúpula de Repsol, Telefónica y Endesa. Así titulaba El Periódico, del Grupo Zeta, en su edición del pasado 22 de agosto. Al parecer, el presidente del BBVA estaba dispuesto a que el nuevo Gobierno cambiara a cualquier presidente de empresa privatizada, en el bien entendido caso de que el BBVA no lo es: de hecho, es la suma de Argentaria (antiguo banco público) y de BBV, que nunca fue estatal. Así que no entra en la rueda. Ahora bien, Manuel Pizarro, presidente de Endesa, César Alierta, por Telefónica, y Alfonso Cortina (en aquel entonces todavía presidente de Repsol YPF) eran otra cosa.

Pero de agosto a diciembre las tornas se han cambiado. Ahora, Francisco González filtra a la prensa que si Sacyr Vallehermoso pretende entrar en el Consejo, el asunto acabará en los tribunales. En otras palabras, está dispuesto a pelear hasta el final, independientemente de los deseos del Gobierno Zapatero.

Precisamente, FG está haciendo valer ante el Ejecutivo que BBVA es una pieza clave en cualquier movimiento accionarial, como accionista de referencia de Telefónica o Repsol. Sin embargo, en Repsol YPF ya ha habido relevo, por lo que FG sólo podría ser útil en Telefónica.

En cualquier caso, toda la estrategia de Francisco González pasa ahora por, si no pactar, cosa que ya considera imposible, mantener al menos una puerta abierta con el Ejecutivo Zapatero. Que se sepa, esa puerta no se ha abierto aún.