Es sabido que después de cometer múltiples delitos de gran gravedad, el mafioso Al Capone acabó entre rejas por fraude fiscal. Tras librarse de las acusaciones por la cacería con Bermejo, el juez Baltasar Garzón se ve ahora imputado por su causa contra el franquismo. El Supremo ha decidido por unanimidad que existen indicios suficientes para imputar al juez por prevaricación.
La decisión es consecuencia de la querella interpuesta el pasado 26 de enero por el sindicato Manos Limpias. El sindicato considera que Garzón inició un procedimiento para la investigación y exhumación de las fosas del franquismo sin tener competencia para ello y en contra del criterio de la propia fiscalía de la Audiencia Nacional.