- Rubalcaba, presente en el desayuno, no dijo ni esta boca es mía, y se limitó a felicitar a Obama.
- Carme Chacón, abandonó antes de tiempo el acto para no ser preguntada por el tema de la sucesión, y Eduardo Madina sufrió un ataque de pánico ante los micrófonos.
- Emiliano García Page, también presente, señaló que la sociedad no va a permitir agotar el mandato de Rubalcaba.
- El secretario General del PSOE de Castilla La Mancha afirmó que cuanto más tiempo pase más presión tendrá el PSOE para abordar el debate de sucesión.
- El presidente de la Junta de Andalucía apoya el derecho a decidir de los catalanes, pero no sobre la independencia, y teme que PP y CIU estén haciendo el paripé y terminen pactando "aunque no quieren decir nada antes de las elecciones".
El debate por la sucesión en el PSOE está abierto. El presidente de la Comunidad Autónoma de Andalucía, José Antonio Griñán, ha sido el protagonista en los desayunos de Europa Press, donde se ha evidenciado que la crisis en el seno del PSOE es más grave de lo que quiere hacer creer su secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba. Al contrario que Barreda, presente en el acto, que reclamaba unas primarias para 2013, Griñán se ha mostrado partidario de convocar las primarias lo más cerca posible de las elecciones, pero ha dedicado una frase durísima a Rubalcaba: "El problema del partido ahora no es de ideas…sino de la impronta o personalidad que tenga una u otra persona".
Rubalcaba (en la imagen de arriba, segundo por la izquierda) escuchó sus palabras en primera fila muy sonriente, pero hizo esperar a la prensa casi media hora tras anunciar su jefe de prensa que iba a hacer declaraciones. Muy a la americana, como un candidato a presidente de película americana de serie B, informó, muy serio de que no iba a hacer otra declaración que no fuera su sincera felicitación a Obama por su victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Carme Chacón (foto inferior, al centro de la imagen), su principal oponente, presente en el acto, abandonó el desayuno antes de tiempo para eludir las preguntas. No así Eduardo Madina, que sufrió un ataque de pánico ante los micrófonos y salió huyendo del hotel Intercontinental. Desde luego no tiene las dotes del "presentador de telediario por el que no hay que apostar en el partido", como comentó García Page, secretario General del PSOE de Castilla La Mancha, quien señaló que la sociedad no va a permitir agotar el mandato de Rubalcaba, porque "cuanto más decepciona el Gobierno, más presión tendrá el PSOE para abordar el debate".
Griñán habló de muchos temas, de la dación en pago, de la cual es partidario, así como de buscar fórmulas para evitar los desahucios, como la conversión de los pagos en alquileres. No se olvidó de Javier Arenas, "a quien echarán de menos en el Partido Popular, porque es un hombre capaz y hábil, aunque en Andalucía se le ha dado regular", y también habló del PSC y del referéndum y manifestó que no está de acuerdo con el derecho a decidir sobre la independencia de Cataluña", aunque aunque ha incurrido en una contradicción. Previamente, para apoyar al PSC, se ha manifestado partidario sobre la posibilidad de decidir en un referéndum convocado dentro de la legalidad.
Griñán ha atacado tanto al PP como a CIU por su enfrentamiento, y ha señalado que se trata de un debate "entre dos posiciones que se saben irreales", y ha insinuado que todo se trata de un paripé en el que los dos partidos. Ironiza Griñán cuando se pregunta si las peticiones "desembocan en la secesión o desembocan en más dinero", pero augura que todo terminará después de las elecciones con una negociación de la que ninguno de los dos partidos quieren decir nada. Y hasta ahí habló de música. En declaraciones a Hispanidad afirmó que respeta la decisión de Sabina de apoyar a Ciutatans al ofrecerles la letra de un himno de España, pero no le preocupa "porque se le ha escapado a IU, no a nosotros". Carecerá de las dotes maquiavélicas de Rubalcaba para sucederle, como comentan en el PSOE, pero no anda escaso de versatilidad.
Sara Olivo
sara@hispanidad.com