Sr. Director:
Llega la hora de la declaración de la renta y, si estás entre los afortunados que pueden hacerla, no te olvides de dar gracias a Dios, porque es señal de que tienes un trabajo.

 

Para otra parte de los españoles se trata de una buena noticia, ya que Hacienda les devuelve lo que han pagado de más a lo largo del año por retenciones mensuales.

Como ya sabemos desde el año 2008 el sostenimiento de la Iglesia católica depende exclusivamente de los católicos y de todas aquellas personas que reconocen la inmensa labor que la Iglesia desarrolla.

El año pasado nueve millones de contribuyentes rellenaron la casilla de ayuda a la Iglesia Católica, es decir, una proporción arrolladora sobre el número total de los españoles que pagan impuestos.

Marcar la X no supone nunca pagar más dinero, ni que nos devuelvan menos. Incluso aunque la declaración salga a devolver. Podemos marcar dos cruces: una en la de la Iglesia; y la otra, en la destinada a otros fines sociales. ¡Ah! Y que no te confundan, pues el 0,7% no se divide por dos cuando marcamos las dos cruces, sino que se multiplica.

Así cada uno decide el uso que quiere dar a sus impuestos.

María Muñoz