Hay vida política y económica más allá del presupuesto. No está mal si tenemos en cuenta que la frase pertenece al portavoz socialista en la Comisión de Presupuestos, Francisco Fernández Marugán. De esta manera pretende quitar hierro al hecho de que los presupuestos sean papel mojado. Lo son porque parten de unas previsiones de crecimiento económico absolutamente desviadas de la realidad. Y eso hace inviable que la previsión de ingresos, gastos y déficit sea la adecuada.
Pero es que además, a esto hay que añadir todos los planes anticrisis que quedan fuera de las cuentas públicas. No se incluye el Fondo para la Adquisición de Activos Financieros, ni las nuevas líneas ICO para la financiación de PYMES, ni los avales para las emisiones de los bancos ni el paquete de medidas que presentará Zapatero el 27. O sea, no se incluye nada. Da igual: Hay vida económica y política más allá del presupuesto.
Lo que pasa es que los parlamentos se crearon precisamente para controlar a los gobiernos en el uso del dinero público. Por eso los presupuestos son la ley de leyes. Por eso los controles y los debates son mucho más estrictos. Por eso hay mayor transparencia. Pues resulta que todo eso se va por el retrete y al partido en el gobierno parece darle igual. Normal. Al fin y al cabo son ellos los que están manejando los dineros de los españoles. Pero los populares están que fuman en pipa. Y con razón. Censuran que los presupuestos no son los adecuados para afrontar la crisis. Pero sobre todo critican la virtualidad de las cuentas públicas. ¡Menos mal que nos queda el consuelo de Marugán!