Además, BA no responde sobre el agujero negro de su fondo de pensiones.
Miguel Blesa aún representa al primer accionista de Iberia, que es Caja Madrid, con un 23% del capital, y el todavía Ceo de E.ON, Wulf Bernotat, le anima a que sean los alemanes quienes se hagan con Iberia.
Por contra, el presidente de Iberia, Antonio Vázquez, sigue pensando en British, a pesar de que los británicos no ofrecen garantías sobre su pavoroso fondo de pensiones -última minusvalía reconocida: 4.000 millones de euros-.
Sin embargo, otros accionistas, por ejemplo, El Corte Inglés, consideran que este no es el momento de una fusión. La acción de Iberia no marcha como debiera por lo que la ecuación de canje les perjudica y que lo que Iberia debe hacer es seguir en solitario, al menos por el momento.