Los independentistas catalanes de ERC presentaron en el Congreso una proposición no de ley sobre financiación de los partidos políticos. Todo un gesto, sólo que alguien descubrió que se trataba de un plagi Palabra por palabra, la iniciativa republicana repetía el texto presentado un 16 de septiembre de 1996 por Izquierda Unida, con la firma de Rosa Aguilar, actual alcaldesa de Córdoba. La única diferencia es que Aguilar hablaba de una donación máxima por persona física de 5 millones de pesetas a un partido político, mientras que ERCV, mucho más moderno y europeísta, habla de 30.000 euros.
Y es que las buenas ideas, como el buen vino, mejoran con el tiempo.
Por cierto, esa misma cantidad es, como ya hemos informado, el límite de ingreso, a partir del cual los bancos deben informar a la policía, por si se tratara de blanqueo de dinero. Pero es una mera coincidencia.