El debate se ha levantado ahora en torno a los dos inmigrantes muertos en suelo español (Melilla). Uno tenía un tiro en el costado y otro en el glúteo, según ha informado el ministro Alonso, que ha señalado que se ha abierto una investigación rápida y transparente y que será él mismo quien de cuenta del resultado de esa investigación en el Congreso de los Diputados.
Mientras tanto, Alonso ha querido dejar claro su reconocimiento a la Guardia Civil que realiza una labor extraordinariamente dura en situaciones especialmente difíciles y con gran profesionalidad. Vamos, que no quiere otro episodio Roquetas, al tiempo que advierte que la situación de acoso que viven los guardias civiles es muy alarmante. Y es que repeler las avalanchas de los inmigrantes y ser respetuoso con los derechos humanos no resulta una labor sencilla.
Por otra parte, los 320 militares que acudirán a reforzar las labores de vigilancia en cada una de las ciudades autónomas, estarán a las órdenes de la comandancia de la Guardia Civil con un mando de coordinación formado por un oficial del Ejército y uno de la Benemérita. Los militares permanecerán en las ciudades autónomas de manera indefinida. Por cierto, ¿por qué estos detalles los ha ofrecido el ministro del interior en lugar del ministro de Defensa?