La empresa quiere cerrar 2007 con una plantilla de 100.000 trabajadores
La constructora propiedad de Esther Koplowitz se mantiene fiel a sus planteamientos tradicionales: crecimiento orgánico y un reducidísimo endeudamiento que le diferencia del resto del sector. FCC, que celebró en la tarde del jueves en Barcelona su Junta General de Accionistas, se parece mucho a su empresa amiga, El Corte Inglés. Ambos odian el endeudamiento, precisamente en un momento en el que lo moderno es un apalancamiento a ser posible fuera de control. Tan amigas son ambas empresas que todos los centros de El Corte Inglés, que ha creado, según el Consejero Delegado, Rafael Montes, una división especializada en la construcción de estos centros.
Esa aversión al endeudamiento fue lo que llevó a FCC a no entrar en Endesa cuando el Gobierno así se lo solicitó. Quizá ahora se hayan arrepentido, pero el caso es que Montes insiste en que "por el momento" no les interesa comprar eléctricas.
Sí es cierto que gracias a no endeudarse, como han hecho Acciona, Ferrovial, Sacyr o ACS, la cuenta de resultados no puede ser más plácida. En 2007 la facturación crecerá un 40%, el EBITDA un 42% y el beneficio neto atribuido un 38%.
Y todo ello a pesar de la fuerte internacionalización y del incremento de plantilla, que a comienzos de año era de 92.000 trabajadores, en el momento presente ya superan los 96.000 y terminará el año con 100.000 empleados.
Por cierto, por si faltaba alguien por enterarse, FCC no tiene el menor interés en asociarse con Colonial, que comprara el 15% del capital en poder de los Entrecanales, participación que, por caprichos de la historia ha hecho que Alicia Koplowitz, de forma indirecta, sea hoy la propietaria del 1,5% de la empresa de su hermana.