La derrota del partido demócrata en Estados Unidos en las últimas votaciones legislativas ha llevado a organizaciones como Planned Parenthood, la mayor federación abortista del mundo, a tratar de cubrirse las espaldas, o mejor dicho, llenarse los bolsillos, antes de que una nueva derrota en las elecciones generales dentro de unos años, les cierre el grifo de las ayudas públicas.
Análisis y actualidad, habla de cómo la Planned Parenthood de Nueva York, federada a la Planned Parenthood Federation of America, recibirá durante los próximos cinco años una subvención de 611.823 dólares al año por parte del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos para programas juveniles de adiestramiento sexual en escuelas de Nueva York. Eso significa que va a realizar sus programas de educación sexual para niños de entre 10 y 13 de origen hispano y afroamericano (vaya coincidencia que sea para los jóvenes de las dos mayores minorías del país).
Parece que ahora se está pagando el apoyo recibido durante la campaña; la pena es que acaben pagando los más débiles, como siempre, que son los niños.
Juan María Piñero
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