El discurso de Villasante se centra en atacar a sus competidores. Esos que se comparaban entre iguales y que han escalado puestos en el ránking de solvencia por mor de las ayudas de Estado o las recapitalizaciones. Villasante termina su marcha con una transparencia tipo Alejandro Sanz: No es lo mismo. No es lo mismo estar en territorio opaco que no estarlo. No es lo mismo haber sido recapitalizado que no. Así que no somos comparables, no es nuestro benchmark.
En el fondo se encuentra la incomodidad de que las ayudas de Estado pueden afectar a los no beneficiarios. O sea, a los españoles. Las ayudas en todo caso no deberían de distorsionar a la competencia, apunta. ¿Se han planteado denunciar a las autoridades de Competencia? Villasante no contesta. Por supuesto que no. Kroes no actuaría conforme a derecho sino en función de las presiones ejercidas por los gobiernos. Pero en todo caso, la AEB reclama transparencia. Por qué se ha entrado en determinadas entidades, durante cuánto tiempo, con qué objetivo, etc. Porque lo que tiene claro es que las facilidades de las subastas no son a precio subvencionado ni para la compra de activos tóxicos. Así que en el caso de España no ha habido ayudas a los bancos. Una idea en la que insiste en varias ocasiones.
En todo caso, Villasante considera que la capitalización de la banca española es suficiente e insiste que la directiva sobre capital sigue estando vigente y esta establece un ratio de capital del 7%, no del 11% como se han colocado algunos bancos europeos tras la intervención.