Las empresas cotizadas aumentaron su beneficio un 32% y su dividendo un 20%. La rentabilidad de la renta española está disparada: un 32% hasta el 12 de diciembre

La Bolsa española está que lo tira. La rentabilidad del Ibex 35, desde el 1 de enero al 12 de diciembre, se incrementó en un 32%, muy por encima de las bolsas norteamericana, francesa, británica e italiana. La rentabilidad total, incluyendo dividendo y otros pagos, ha sido del 36,6%. Durante el ejercicio, el Ibex 35 ha marcado un récord histórico, superando los 14.200 puntos. En los nueve primeros meses del año, el beneficio de las empresas cotizadas en la Bolsa de Madrid alcanzaron los 33.947 millones de euros, un 32% más que en el mismo periodo del año anterior. Hasta noviembre las empresas cotizadas habían remunerado a sus accionistas 22.869 millones de euros, un 20% más que en 2005. En 2006, por vez primera en su historia, la capitalización de las compañías admitidas a cotización superó el billón de euros. Y también durante 2006 el volumen de contratación superó ese billón de euros. Aunque las cifras no son comparables, a título de curiosidad hay que recordar que el PIB español alcanzará el billón de euros en 2007, pro primera vez en su historia. Para el presidente de Bolsas y Mercados españoles (BME), Antonio Zoido, este es el ejercicio más brillante de la historia de la bolsa española. Lo que está claro es que España es cada día más financiera. En los últimos cuatro años, el conjunto de activos financieros de las familias españolas creció 600.000 millones de euros, un 50%. Además, la participación de las familias como propietarias de acciones cotizadas se sitúa en el 23,6%, muy superior a la media europea. Una bolsa tan inflada y una inversión tan acentuada en bolsa puede ser un éxito para los mercados financieros y también un peligro para las economías familiares. Eso sí, los inversores no residentes copan el 34,2% de las acciones de las compañías españolas cotizadas.