El director general de La Caixa, Juan María Nin, sigue presumiendo de ser la primera caja de España y del mundo. Y eso a pesar de que la suma entre Caja Madrid y Bancaja les rebaja al segundo puesto del pódium. Eso es por deformación profesional; hasta que no vea los números en los balances en junio o en diciembre podemos comparar. Vale, aceptamos pulpo.
En todo caso, considera que la fusión entre la madrileña y la valenciana es una idea brillante y avanza que sus gestores lo van a hacer muy bien y lo aplaudimos. Vamos que están muy mosqueados porque en la construcción de los países catalanes la integración de La Caixa con Bancaja habría sido pieza fundamental.
En general, sobre el proceso de reestructuración señala que permitirá ganar tamaño y solvencia y que eso es saludable. Nos gusta la competencia, bienvenida.