• Entre 2010 y 2060, el gasto en pensiones aumentará en España en 3,6 puntos del PIB (por encima de la media comunitaria de 1,4 puntos).
  • Por eso, Bruselas pide a España seguir retrasando la edad de jubilación para afrontar el gasto en pensiones.
  • Y es que la pirámide poblacional tiene forma de peonza, no de pirámide.
  • A medio plazo, la CE reclama a España un ajuste estructural permanente de 4,8 puntos del PIB (a la UE, de 2,7).
  • Pero es injusto para los ciudadanos que nos aprieten tanto las clavijas mientras PP y PSOE siguen sin atreverse a reformar la Administración.
La Comisión Europea nos sigue apretando las clavijas. Este martes ha ha pedido al Gobierno de Mariano Rajoy que siga retrasando la edad de jubilación en función del aumento de la esperanza de vida para frenar el gasto en pensiones y garantizar así la sostenibilidad de las finanzas públicas a largo plazo: "España debería garantizar que el factor de sostenibilidad del sistema de pensiones incluya un vínculo claro de la edad de jubilación con cambios en la esperanza de vida de forma que el gasto en pensiones pueda frenarse a largo plazo", dice la CE.

En su informe anual sobre sostenibilidad fiscal en la UE, Bruselas señala que la reforma de las pensiones aprobada en 2011, que retrasa la edad de jubilación a 67 años, ha tendido "un impacto positivo visible". No obstante, alerta de que el gasto en pensiones de España seguirá claramente por encima de la media comunitaria hasta 2060, incluso teniendo en cuenta los efectos de esta reforma. Y, "como consecuencia, se observan riesgos a la sostenibilidad del sistema de pensiones en España a medio y largo plazo". De hecho, a medio y a largo plazo, si no cambian las políticas vigentes, la deuda pública seguirá aumentando desde el 97,1% del PIB en 2014 hasta el 114,4% en 2020 y el 129,4% en 2030.

Entre 2010 y 2060, el gasto en pensiones aumentará en España en 3,6 puntos del PIB (por encima de la media comunitaria de 1,4 puntos). "Se necesita contener más el aumento del gasto relacionado con el envejecimiento de la población para contribuir a la sostenibilidad de las finanzas públicas a largo plazo.

Recientemente recogimos los datos del INE según los cuales, en la comparación de las pirámides de población 2001 y 2011 se deduce que las generaciones más numerosas, que en el censo de 2001 estaban en torno a los 25 años, se sitúan ahora en torno a los 35 años de edad. Es decir, la famosa pirámide, que debería ser más ancha en la base para luego ir reduciéndose paulatinamente hasta las mayores edades, tiene forma de peonza: base estrecha, la mitad se ensancha, y termina en punta. Luego las recomendaciones de la UE tienen sentido. Eso sí: habría que ver en qué profesiones se aumenta y en cuáles no, en función del desgaste que produzcan, riesgos para la salud, etc.

Pero hay más: a medio plazo, Bruselas reclama a España políticas que permitan un ajuste estructural permanente de 4,8 puntos del PIB con el fin de garantizar la sostenibilidad de los cuentas públicas. Este esfuerzo es muy superior a la media exigida a la UE (2,7 puntos) debido al peor punto de partida de España. Aunque esto sí es más discutible: porque como sigamos ajustando, y no haya alguna política de crecimiento, esto no se levanta en décadas.

Es injusto para los ciudadanos que nos aprieten tanto las clavijas. El Gobierno del PSOE lo hizo fatal. El del PP sigue sin atreverse a promover una reforma de la Administración como reclama la ciudadanía, que somos quienes siempre pagamos los platos. Y ambos no se atreven a pactarla.

Además, o nacen más españoles, o esto no se sostiene. De ahí, la necesidad de implantar el salario maternal.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com