Sr. Director:
Se dice que hay mucha violencia en las aulas, pero estamos confundiendo las cosas, lo que hemos visto en la televisión, una adolescente pegando a otra adolescente, no es violencia es crueldad con todos los agravantes inimaginables: Premeditación, no es una respuesta en un momento de ira, no, fríamente, un grupo de niñas se llevan a una compañera a un descampado para pegarle.
No es un acto de venganza por una ofensa, no, porque no hay ninguna ofensa. Es crueldad, porque es recrearse en hacer daño, pero no solo por parte de la autora, todas las que le acompañaban son también responsables.
No se me olvidan, es imposible olvidar, los gritos de las compañeras diciendo "mátala, mátala" Y el alarde de impunidad y de sarcasmo grabando la pelea y colgándola en internet ¿A dónde hemos llegado? ¿A que unas niñas sean capaces de tanta maldad, que no se conforman con hacer daño, quieren matarla? No veo ningún hecho semejante en la historia. Los gladiadores mataban pero uno contra uno y por mandato. Si, las fieras en el circo mataban a los hombres, pero eran fieras, pero en este caso son niñas.
Me preguntaba ¿Cuál es la causa de tanta maldad? Es difícil de encontrar porque además es mucho simplificar decir que solo hay una causa. Pero leyendo la prensa he visto una causa muy importante.
Según dice Isabel Serrano (ABC 9-8-08) según la ley de Responsabilidad del menor, el fiscal puede imponer –según la gravedad de la falta- desde el internamiento en un centro de menores hasta su puesta en libertad. En este caso, la han puesto en libertad, a cargo de los padres y si comete otro delito, los padres serán los responsables. ¡La han dejado en libertad!
Y la víctima ¿Qué? ¿Nadie se ocupa de ella? ¿Como la resarcen del daño que le han hecho y el trauma que tiene? ¿Como podrá la criatura volver al colegio, si sabe que impunemente le pueden pegar? ¿Como se sentirá abandonada por la justicia?
Y en la sociedad ¿estamos dispuestos a pasar por alto estos sucesos? ¿Por que miramos para otro lado cuando vemos estos hechos?
Por favor recapacitemos en la clase de sociedad que estamos consintiendo que se forme y tomemos la medidas oportunas
Maria Bejarano
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