• La excusa es la cruz que sobresale en el techo y que fue definida como "demasiado alta" por el secretario comunista provincial Xia Baolong.
  • Pero lo que se pretende es amedrentar la numerosa presencia cristiana en la zona. 
Como se sabe, la dictadura comunista china ha sido perseguidora de los cristianos. Y, en pleno siglo XXI, lo sigue siendo. Miles de cristianos de la provincia oriental de Zhejiang están realizando desde hace días una acampada pacífica delante de la iglesia de Sanjiang (en la imagen), en la ciudad de Ou Bei, para evitar que el edificio sea demolido por las autoridades, informa AIN de Asia News.

La protesta de los fieles se inició el pasado 25 de marzo, cuando las autoridades calificaron la iglesia como "ilegal", dado que habría violado los cánones de la construcción (lo que suena a excusa barata para derribarla). El 3 de abril las autoridades enviaron un aviso oficial a la congregación protestante para advertirla sobre la demolición "dentro de los 15 días", dado que la estructura "presenta riesgos de seguridad". El gobierno envió el mismo día a miles de agentes de policía al área para "convencer" a los cristianos de que salieran del edificio para la demolición. Desde entonces, 300 fieles se dan el cambio dentro y afuera de la iglesia para impedir de manera pacífica que las escavadoras inicien la demolición.

El pasado sábado 5 de abril los pastores protestantes guiaron una marcha que terminó delante del edificio, donde se desarrolló una vigilia de oración que duró toda la noche. Uno de los fieles explica: "No queremos un enfrentamiento violento. Somos pacíficos y estamos rezando a Dios para que nos ayude". Pero en las paredes del edificio aparecieron escritos con ideogramas "chai", que indican un "lugar para demoler".

Según los fieles y los pastores de la Sanjiang, detrás de la decisión de demoler la iglesia existen en realidad dos motivos políticos: por una parte está la polémica sobre la cruz que sobresale en el techo y que fue definida como "demasiado alta" por el secretario comunista provincial Xia Baolong. Por otro lado está el hecho que la estructura comprende más de 1.000 metros cuadrados y por lo tanto es uno de los edificios más grandes de la zona. La verdadera intención del gobierno sería la de amedrentar la presencia cristiana en Wenzhou, que en su momento fue definida la "Jerusalén de Oriente" por el gran número de cristianos. Aún hoy es uno de los centros más importantes de la fe en China.

Thimoty Liao, uno de los pastores locales, ha declarado: "Dicen que nuestra cruz es demasiado alta, pero hay muchísimos edificios que violan los reglamentos por la altura de sus estructuras. Es claro que se trata sólo de un pretexto para tomar de ira a las iglesias y a los cristianos". En la iglesia se reunían, antes de los trabajos, unos 1.800 fieles cada domingo: ahora gracias a la obra de ensanchamiento, su capacidad aumentó hasta 4000 asientos.

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com