Sr. Director:
En este año 2004, la familia es programa de los partidos políticos mayoritarios que optan a gobernar España. Se trata de una novedad histórica sin precedente en nuestro país. Nadie quiere reconocerlo, pero todo esto se ha debido a la irrupción del Partido Familia y Vida en el mundo electoral español. Parece que, debido a este pequeño "David", los "Goliats" del panorama político se han estremecido, y han querido sacar las mejores bazas para que sus votantes vean que también se preocupan por la familia. No van a ser ellos menos: PP y PSOE cada día nos ofrecen nuevas pagas a las madres trabajadoras y subvenciones por hijos.
Todo muy atractivo, si no fuera porque estos mismos partidos políticos incluyen en sus programas equiparar el matrimonio a cualquier forma humana de unión de hecho: PSOE y PP, éste último dicho por Mariano Rajoy el día 2 de marzo. Además de que la familia, lo que es linealmente en su principio y final, tampoco importa mucho: el PP y PSOE siguen en su línea, o pretenden aumentar el número de abortos anuales en España; el PSOE quiere ofrecer eutanasia para enfermos y mayores. Y por último, ambos partidos quieren dar a los hijos adoptados unos "padres" que sean homosexuales, porque estos tienen el "deseo" de ser padres de verdad, olvidando el derecho del hijo a tener una familia compuesta por un hombre y una mujer y en donde, a priori, no sufra menoscabo su salud psíquica u orientación sexual.
El descrédito de los "Goliats" es claro: no se puede defender la familia atentando contra la institución humana que la funda y sus frutos de amor en los hijos y los padres ancianos. La incoherencia de Rajoy y Zapatero en este punto hace que la familia parece estar en boca de todos, pero en la mente de nadie.
Victoria Uroz
vuromar@alumni.unav.es