La Fundación Vida considera un derecho y ve muy positivo que el Consejo de Colegios de Médicos de Catalunya recurra ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) la decisión de un juez de Barcelona de anular dos artículos del Código Deontológico Médico Catalán por los que se garantizaría la confidencialidad a los menores maduros y justifica no recetar fármacos, realizar abortos y diagnosticar a menores sin el consentimiento necesario de padres o tutores.
En el artículo 59 de dicho código se especifica que el médico "no practicará un aborto o esterilización sin el consentimiento libre y explícito del paciente, en especial cuando sea menor, pero con capacidad para comprender aquello que se consiente. Cuando no haya esta capacidad, hará falta el consentimiento de las personas vinculadas responsables". "Si en la Seguridad Social tienes que firmar un consentimiento informado hasta para la extracción del cerumen de los oídos, ¿cómo no se va a exigir ese consentimiento para un aborto provocado? Toda mujer tiene derecho a saber qué le puede pasar. Y los médicos deben informar de las consecuencias de sus actuaciones", afirma el director de la Fundación Vida, Manuel Cruz.
La sentencia del juzgado contencioso-administrativo número 12 no ha sido ninguna sorpresa para el Colegio Oficial de Médicos de Catalunya, que ayer, en una reunión extraordinaria, decidió presentar el recurso, con el beneplácito de los cuatro colegios médicos catalanes.
"Si el código deontológico puesto por escrito expresa lo que ya estaba por consenso en la comunidad médica actual, bienvenido sea. Además, porque son unas normas deontológicas que van a favor de los menores y de la vida", concluye Manuel Cruz.
Fundación Vida