España sobrepasará los cinco millones de parados en el cuarto trimestre de este año, con lo que situará en una tasa de desempleo cercana al 23%. A ello hay que añadir una economía cerca de la recesión, según el 'Avance del Mercado Laboral' que elaboran Analistas Financieros Internacionales (Afi) y la patronal de grandes empresas de trabajo temporal (Agett).
Los expertos prevén que tanto en el cuarto trimestre de este año como en el primero de 2012, el PIB registrará tasas negativas, con lo que España entrará de nuevo en recesión, aunque de manera temporal, pues en los tres trimestres restantes de 2012 las variaciones serán positivas, aunque tendrá como consecuencia un crecimiento cero del PIB en 2012. ¿Por qué? Por el mal comportamiento de la demanda nacional, especialmente por la dimensión que está adquiriendo el recorte del gasto público.
Para más inri, la ralentización en países como Alemania y Francia "terminará por lastrar el comercio exterior de bienes españoles", por lo que la inversión en bienes de equipo volverá a terreno negativo. Así las cosas, el sector exterior reducirá su aportación al crecimiento del PIB desde el 2,1% de 2011 al 1,5% en 2012.
Según José Antonio Herce, socio de Afi, las primeras acciones del nuevo gobierno deben incluir especialmente soluciones para atajar el problema del paro, junto a una reforma del mercado laboral "de calado".
Pero mucho nos tememos que una reforma laboral 'de calado' no la contempla el Gobierno de Mariano Rajoy. Una reforma laboral 'de calado' sería despido libre con una indemnización máxima a cambio de salarios dignos, así como reducir los impuestos laborales, especialmente las cuotas sociales y sustituirlos por IVA, además del salario maternal. O sea, ésta.
José Ángel Gutiérrez
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