Sr. Director:

No sé si es un error de imprenta..., o si la FERE está vacilando... o si nos está 'vacilando'... La cuestión es que parece no tener todas las agallas necesarias para pechar con las consecuencias de la objeción de conciencia a la EpC.

Y ¿qué consecuencias cree que va a tener no oponerse a ella?... ¿tendrá entonces agallas para construir -totalmente contra corriente- todo lo destruido, si ahora no es capaz de defender lo propio ante avasallamientos inaceptables? ¿o se trata de esconder la cabeza debajo del ala, ser 'políticamente correcto' y pasar lo más 'camaleónicamente' posible también a través del "carácter propio" (antes lo llamábamos 'Ideario') de los Centros a los que dice representar? ¿están éstos de acuerdo, o bien ha dejado de representarlos? Seamos serenos y cuerdos: animo a la FERE a que anime, estimule, promueva y pelee con todos los medios a su alcance para que sus representados hagan una MASIVA objeción de conciencia a la EpC, por lo menos tan escandalosa como la que montaría el partido en el Gobierno si otros pretendieran imponer obligatoriamente desde la infancia su propio modo de enfocar las cosas: también aquí, haya equidad.

Teresa Clares Gallástegui

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