El Consejo de Ministros reunido este viernes aprueba el proyecto de Ley de Economía Sostenible (LES), una especie de Ley de Acompañamiento que lo mismo sirve para un roto que para un descosido. Veamos: se incluye el IVA reducido para las chapuzas del pomposo Pacto de Zurbano y el incremento de la fiscalidad del capital. Además, se aprueba la eliminación de la deducción por vivienda a partir del próximo 1 de enero salvo para las rentas más bajas. Tan sólo queda por regular el manguerazo del ICO, un asunto que ni estaba ni está en la LES y que el Gobierno propuso -a propuesta de la CEOE- en el Palacio de Zurbano.
También se incluyen las siguientes medidas: obligación de un informe de remuneración de las sociedades cotizadas, más inspección de fondos de inversión y de pensiones, obligación de cumplir con los plazos de mandato en los organismos reguladores, incremento de la deducción de I D del 8 al 12% y mejora los plazos de pago de la administración. Tendrán que pagar en 30 días en lugar de los 60 actuales, desde la expedición de obras. Y aquí es donde está el quid. Porque lo que hacen los ayuntamientos sencillamente es no expedir el certificado de obra. Y así es como la mora se alarga, las compañías se ahogan y se pierden empleos. La clave no esta en acortar el plazo, sino en presionar a los consistorios. Lo explicaba el presidente de las Cámaras de Comercio, Javier Gómez Navarro: la clave está en la relación de fuerza, porque siempre se puede fechar más tarde si tienes elementos de presión.
La respuesta del PP ha llegado desde Colombia. En su capital, Bogotá, se encontraba Rajoy. País de moda porque recientemente estuvo Aznar en Barraquilla. El caso es que Rajoy considera que la LES es insignificante, un escapismo para evitar tomar las medidas que de verdad necesita nuestra economía. Una manera como otra cualquiera de anunciar que el PP la apoyará.
Andrés Velázquez
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