Sr. Director:
Al estar transferidas a las comunidades autónomas las competencias en educación, éstas quedan determinadas al color político de cada región. Las comunidades con gobierno socialista apuestan más por la educación pública, que por cierto, sale más cara que la concertada o privada, teniendo ésta una gran demanda que sobrepasa la oferta por su alta calidad.
La mayoría de los colegios concertados son de titularidad eclesiástica. Las subvenciones que perciben están muy por debajo del coste real, lo que hace que deban pedir recursos por actividades extra o donativos voluntarios, lo que pretende eliminar el Gobierno sin dar solución.
La aprobación de la LOE (Ley Orgánica de Educación), por otra parte, es una descarada discriminación hacia las clases de religión católica, pues ni tan siquiera figura como oferta obligada en los centros, no tendrán carácter evaluable, además, carecerán de alternativa. Con ésta nueva ley del Gobierno de Zapatero, el derecho a elegir tipo de educación por parte de los padres y centro educativo, recogido en la Constitución, se incumple estrepitosamente. Suprime derechos y da el papel totalizante de la educación al Estado, todo un retroceso democrático.
Educación para la Ciudadanía es un intento teocrático de control estatal hacia colegios públicos y concertados, donde el Gobierno pretende adoctrinar a las nuevas generaciones desde su particular visión.
Alicia Santamaría Gálvez
asantamariagalvez@yahoo.es