- El fabricante afronta otra demanda colectiva en EEUU por ese dispositivo para evitar la fecundación.
- Y es que el procedimiento, además de eso, perfora úteros, colon, paredes del estómago...".
- Miles de mujeres crearon un grupo en Facebook para protestar y mostrar su descontento.
- Se ha sumado a ellas Erin Brockovich, la activista a la que puso cara en una película Julia Roberts.
- Bayer ha esterilizado por esa vía a 750.000 mujeres en los países desarrollados.
La historia de
Erin Brockovich (
en la imagen) en EEUU, especialmente conocida después de que
Julia Roberts interpretara su vida en una película que lleva su nombre, está llena de caminos y recodos. Se enfrentó en su día -de eso iba el filme- al sistema corporativo americano por un caso de
contaminación en las
aguas subterráneas. La activista ha vuelto a la actualidad al sumarse a la lucha en otro caso desigual: la batalla contra el gigante abortista
Bayer para sacar del mercado, por sus 'daños colaterales', otro de sus peligrosos métodos anticonceptivos, el
Essure. Es un método, dicen, rápido y no quirúrgico para esterilizar a las mujeres, pero la multinacional calla, en su lógica perversa, que ha
herido a miles de ellas.
A la multinacional le puede pasar lo mismo que le ocurrió con otras de sus
píldoras anticonceptivas (como las orales
Yasmin, Ocella, Mirena y Gianvi) por cuyos 'daños colaterales' (lesiones personales, algunas de ellas mortales)
ha tenido que pagar unos 1.241 millones de euros para resolver
8.900 reclamaciones en Estados Unidos.
El procedimiento del Essure consiste en insertar pequeñas espirales en forma de bobinas en las
trompas de Falopio para impedir que el
esperma llegue a los
óvulos. Tiene la triste 'gloria' de haber sido aclamado como el método de control de
natalidad más económico y menos invasivo (porque no corta o sella las trompas de Falopio), cuando en realidad, lo que está haciendo, como ha denunciado la propia Brockovich, es
perforar úteros, colon, paredes del estómago...".
Bayer, en contra de la evidencia, insiste en que su producto es seguro y tiene el visto bueno de la
Agencia de Control de Alimentos y Medicamentos de EEUU (FDA). No es así. Ese mismo departamento afronta ya una
demanda colectiva contra la compañía, que deberán resolver los tribunales.
Entre los
efectos secundarios del anticonceptivo Essure están los intensos dolores de cabeza diarios, cansancio, dolores en el cuerpo similares a los de un refriado". Lo cuenta una de las afectadas, la americana
Mara Colón (siete años de dolores), que pronto supo que su situación la sufrían miles de mujeres que habían creado un grupo en la red social
Facebook para protestar contra el método anticonceptivo.
La respuesta dada por la empresa es hiriente. Ajena a la realidad,
Bayer Healthcare, la division del grupo germano que comercializa las
píldoras abortivas, insiste en que las quejas sobre los efectos secundarios son muy
pocas" y culpa a los medios de comunicación del eco de sobredimensionar las reclamaciones. Bayer Healthcare se vanagloria de que hay 750.000 mujeres en el mundo que han comprado ese dispositivo, del mismo modo que se vanagloriaba el viernes pasado, al anunciar sus resultados hasta septiembre, de cómo nutre su beneficio con los anticonceptivos que vende en los
países emergentes. Es la cara más amarga de una industria de la muerte, como Bayer como uno de los factotum más peligrosos.
Mariano Tomás
mariano@hispanidad.com