Los minoritarios del pentapartito se acaban imponiendo
Se han impuesto los minoritarios, como siempre. Bajo el argumento de que "las lenguas tienen derecho" han aprovechado el gobierno para imponer su vena ultranacionalista de corte pancatalanista. Así que van a aplicar la misma medicina que aplican los catalanes: al menos el 50% de las clases deberá de darse en catalán y todos los comercios deberán de tener sus rótulos en catalán.
Lo más lamentable del caso es que el nuevo gobierno Antich desempolvará una normativa de normalización lingüística aprobada por los populares. Eran los tiempos en los que el PP trataba de competir con los nacionalistas, vana estrategia. El PP aprobó la norma, pero nunca llegó a aplicarla. Ya se sabe, las leyes están para no cumplirlas. Por aquello de garantizar el Estado de Derecho. Pero ahora los pancatalanistas han visto el cielo abierto: basta con aprobar una ley que ya existía. Y el que no hable catalán, ya puede ir espabilando.
¿No es hora de que el PP aprenda la lección formulada por Aznar de que no se puede jugar a nacionalista porque nos ganan? Lo de Mª Pau Janer es un buen ejemplo. Y ya puestos, Rosa Estarás, ¿no es hora de aprender que el PP no puede competir con la izquierda a progre, que siempre habrá alguien más de izquierdas que tu? Y por último, ¿es tan difícil asumir que uno es lo que es, un partido de centro-derecha basado en el humanismo cristiano por mucho que le moleste a Gabriel Elorriaga?