Según ha declarado la Secretaría del Príncipe

 

-La Asociación Española de Abogados Cristianos solicitó a la Casa de S.M. el Rey que rectificase esa información

Como se sabe, la prensa chilena reflejó un comentario realizado por la princesa Letizia Ortiz acerca del matrimonio homosexual, durante la última visita de los príncipes a Chile.

Según el diario chileno 'La Tercera', "Letizia inició un distendido diálogo" con un escritor "quien le contó de su fundación y la prohibición en Chile para el matrimonio homosexual. Ante esto, la princesa señaló que el matrimonio en su país 'es para todos' y que se trata de algo ya 'arraigado' en su país, al igual que el aborto, también permitido legalmente en Madrid. Con todo, Letizia -dicen algunos presentes en el diálogo- se cuidó de no dar opiniones personales sobre esas materias. Aunque más tarde, Simonetti señaló que 'había alguien ahí que les decía ¿pero conviven todos así? Y ella les decía 'sí, conviven todos con todos sin ningún problema'. Ella está muy contenta en una España que respeta los derechos de las personas y que considera a todos sus ciudadanos como iguales".

Tras esta información, el pasado 12 de diciembre de 2011 la Asociación Española de Abogados Cristianos solicitó a la Casa de S.M. el Rey que rectificase en relación las informaciones que habían aparecido en varios medios de comunicación de Chile que publicaban que: "La princesa señaló que el matrimonio en su país es para todos -en relación al matrimonio homosexual- y que se trata de algo ya arraigado en su país".

Ante esta solicitud de rectificación, el Jefe de la Secretaría de S. A. R. el Príncipe de Asturias, Jaime Alfonsín, ha respondido negando que la Princesa de Asturias hubiera emitido opiniones o juicios en referencia a los llamados matrimonios homosexuales, estando esta legislación actual recurrida ante los Tribunales. Alfonsín ha respondido por carta en estos términos: "Le informo de que Su Alteza Real, a preguntas del señor Simonetti, presidente de la Fundación Iguales de Chile, sobre el matrimonio entre homosexuales en nuestro país, se limitó a exponer la legislación vigente en esta materia en España, sin emitir opiniones o juicios al respecto". Alfonsín hace extensible también este criterio de no pronunciarse al respecto a S. A. R. el Príncipe de Asturias.

La presidenta de la Asociación Española de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, ha declarado estar "satisfecha con la respuesta de la Casa Real porque esta institución que representa a todos los españoles y que es tan querida en nuestro país y en Hispanoamérica no debe ser utilizada por el lobby de la ideología de género para legitimar sus posturas radicales".

Este escándalo motivado por las declaraciones de la princesa Letizia se une al otro escándalo que sacude a la Casa Real, la trama Nóos que presuntamente implica a Iñaki Urdangarin, marido de la infanta Cristina. Según ha recogido la prensa, Anticorrupción mantiene que no hay datos para pedir la declaración de la infanta Cristina ni como testigo y, mucho menos, como imputada. La Fiscalía, que espera en cualquier caso a conocer la declaración de Iñaki Urdangarin el 25 de febrero, considera que los interrogatorios ante el juez de Miguel y Marco Antonio Tejeiro, los cuñados de Diego Torres, no hacen más que confirmar su tesis original, esto es que la hija del Rey nunca estuvo al tanto de los trabajos en la fundación, que apenas pisó, y que su pertenencia a la directiva era meramente decorativa.

Por su parte, el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, en consonancia con los planteamientos de Anticorrupción, confirmó que su departamento, "hasta el momento", no tiene "ninguna previsión" de solicitar la citación de Cristina de Borbón. Eso sí, dejó claro que será él mismo el que en última instancia tome la decisión.

Aunque el juez José Castro, instructor del caso Urdangarín, aseguró ayer que "si tengo que citar a declarar a la Infanta, la citaré; ¿por qué no iba a hacerlo?".

El director de Hispanidad, Eulogio López, ha venido defendiendo que detrás del caso Urdangarin está doña Letizia y su amigo Pedro J. Ramírez para que el Rey abdique en el Príncipe Felipe.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com