Con los tibios siempre ocurre lo mismo: necesitan justificar su propia cobardía. El Gobierno Rajoy es tibio en muchas cosas pero en ningún otro asunto como en el derecho a la vida. Sí, hablo de aborto, porque según el inefable presidente socialista andaluz, Griñán, las expropiaciones soviéticas de vivienda programadas se harán para respetar el derecho a la vida. Y el que quiera aprender, que vaya Salamanca.
Pero volvamos al PP, porque la macedonia mental, macedonia interesada, del PP, respecto a la financiación del aborto afecta a toda España y a todas las comunidades autónomas. La pregunta es: ¿está obligada una comunidad autónoma a financiar el asesinato de inocentes en el vientre materno, esto es, a pagar abortos Por ejemplo, Navarra Confidencial nos habla de eso mismo para la Comunidad Foral.
Entendámonos: cualquier administración puede negarse a financiar el crimen del aborto. Hasta la Ley Zapatero de 2010 no se les podía exigir ni con sofismas. Pero las comunidades del PP, por ejemplo, la de Madrid, lo financiaban. Se trataba de una despenalización. Por tanto, no había nada que financiar con dinero público.
Luego llegó la Ley Aído 2010: continuó el aborto libre pero ya no era un homicidio no castigado sino un derecho en toda regla. Rajoy, el tibio, se aferró a este detalle y todos los gobiernos del PP, sobre todo los autonómicos, se apresuraron a excusarse: lo siento, ahora el aborto es un derecho, por tanto tengo que financiarlo.
Un sofisma como una casa. Veamos: en la Constitución existen muchos derechos que el Estado tiene la obligación de defender pero no de financiar. Por ejemplo, el derecho al trabajo, pero eso no significa que un presidente autonómico deba crear puestos de trabajo artificiales y pagar los salarios de los mismos. También existe el derecho a la vivienda pero las CCAA y ayuntamientos no regalan casas a todo aquel que no la tenga. Insisto: no hablo de procurar sino de financiar.
Además, si el aborto es un derecho cabe discutir si se debe financiar el aborto en los hospitales públicos. Pero, miren por dónde, el PP ha utilizado el argumento para financiar abortos en cualquier abortorio privado. Y sobre esto no tiene obligación alguna. Lo hace porque le da la realísima gana.
Naturalmente, apenas hay abortos en hospitales públicos, porque un médico que ha obtenido una plaza en la sanidad pública quiere curar a la gente, no convertirse en un matarife. Quieren ayudar a la vida no a la muerte.
Y en los hospitales privados lo mismo. Los buenos hospitales privados hacen prácticas que pueden implicar abortos, ciertamente, como la FIV, pero no tienen mataderos para cargarse embarazadas. Porque una cosa es callarse frente al aborto y otra perpetrarlos.
Además, con los hospitales privados las administraciones crean convenio, donde se especifica qué prestaciones médicas financiará el sector público a ese centro privado. Naturalmente, es el pagano quien decide qué actividades financian y cuáles no.
Lo cierto es que los abortos, casi el 100 por 100, se perpetran en abortorios, no en clínicas. Abortorios que las más de las veces lo único que hacen es eso: matar niños. Y es a esos a los que financian todos los partidos -PSOE y nacionalistas- y también el PP.
En resumen: el PP paga los abortos porque le sale de las narices. No tiene por qué hacerlo pero pretende pasar por un partido progre de derechas. Es decir, de los que dicen defender la vida y luego financian el homicidio.
Y en este punto me da un poquito de repugnancia.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com