Sr. Director:

La compra de tarjetas de felicitación de UNICEF sirve para financiar, además de programas muy beneficiosos, otras acciones que atentan gravemente contra la vida y la dignidad humana, entre las que destaca la promoción del aborto. Hacemos un llamamiento a los ciudadanos para que no compren esas felicitaciones.

Por cuarto año consecutivo, HO llama la atención sobre la intervención de UNICEF, junto a otros organismos de la ONU, en complicidad con la llamada salud reproductiva y la ideología de género. Parte de los beneficios que puedan obtenerse por la venta de estas tarjetas se destinarán a promover la despenalización del aborto a nivel mundial, las campañas de anticoncepción por esterilizaciones encubiertas y la difusión de materiales de formación sexual hedonista.

También queremos llamar la atención de los responsables comerciales de los establecimientos que las venden, explicando el daño que se hace con sus ventas. Al llegar la Navidad muchos establecimientos comerciales distribuyen estas felicitaciones navideñas editadas por UNICEF sin plantearse las consecuencias de este negocio.

No cabe duda que muchos de los trabajos que realiza esta organización son buenos, y muchas personas trabajan, con la mejor de las voluntades, en esos proyectos por los menos favorecidos. Recientemente HO ha publicado dos noticias sobre las actividades positivas de UNICEF:

-         UNICEF, Príncipe de Asturias de la Concordia: El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ganó el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2006, en reconocimiento de un esfuerzo generoso durante sesenta años en favor de la infancia y, muy singularmente, de su lucha más reciente, en el continente africano, contra la ignorancia, la pobreza y la enfermedad.

-         UNICEF reconoce que el único método eficaz contra el SIDA es la abstinencia: UNICEF reconoce que el único método eficaz contra el SIDA es retrasar el momento de la primera relación sexual y guardar la fidelidad a la pareja. Sólo en tercer lugar habla de los preservativos como prevención para la enfermedad, uniéndose así a la estrategia ABC (abstinence, be faithful, condom) que buena parte de la comunidad científica propugna.

Pero no hay que olvidar que la diginidad humana requiere su defensa integral, y el primer derecho que tiene el niño es el de nacer. Comprar regalos navideños con los que se pueda financiar acciones de muerte supone ayudar a que unos pocos decidan sobre la vida de muchos que todavía no han nacido.

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Raul Sempere Durá

raulsempere@torrelche.com