Tras conocerse los problemas de diferentes bancos con Lehman, los afectados se pusieron en marcha para intentar negociar con las entidades una solución. Bankinter y Citibank no han ofrecido soluciones satisfactorias, pero el resto está aún en fase de negociación. La preparación de sus reclamaciones exige a los clientes contar con una mínima documentación.
David García, portavoz de la Plataforma de Afectados por Lehman, bancos islandeses y Madoff, cuenta que al solicitar la copia de un contrato Banif respondió al cliente que debería tenerla. Banif no se negó a facilitarle el documento. Sólo le pidió 174 euros. Una minucia, teniendo en cuenta que el cliente había invertido 180.000 euros que no ha vuelto a ver. Cuando el mismo cliente solicitó el cuestionario de satisfacción que había entregado, la entidad contestó que lo había perdido. Naturalmente, el cuestionario no daba las mejores notas al banco.