Sr. Director:

Sospechosas resultan las abundantes manifestaciones que "leidy Le" le hace a nuestro Príncipe en público. Me refiero a las fotos publicadas con ocasión de los Juegos Olímpicos de Grecia. Manitas, abrazos, caritas de corderita degollada, caricias y giros a la cara del Príncipe (eso jamás lo haría doña Sofía, cogerle la cara a don Juan Carlos y girársela). O mejor dicho, no lo haría ninguna persona adulta a otra, pues para eso existe el lenguaje, y eso lo debería saber doña Letizia que es periodista. También parece emocionarse, más que ningún otro miembro de su familia política ante el triunfo de España, dando saltos y gritos en las gradas.

En fin, ella es así, cuando se sabe  observada tiene que bajar al trapo y demostrarlo todo, que es la super mega, la más de la más, la que más quiere a su marido, la más que se emociona. En fin, SER EL EPICENTRO O CENTRO DE ATENCIÓN y no termina de asumir su  papel, SU SEGUNDO PAPEL.   

Pilar Rodríguez