Francia, España y Noruega ya han manifestado que participarán en la intervención
 Italia ofrece bases militares, pero por ahora se abstiene. Gadafi amenaza con ataques fuera de las fronteras libias, aunque anuncia un alto el fuego ante un inminente ataque aéreo.
La noche del jueves nos dejaba la sorpresa del anuncio del Consejo de Seguridad de la ONU de un borrador que deja abierta la posibilidad de una intervención si las tropas de Gadafi continúan con el bombardeo sobre los rebeldes libios.
Aunque Gadafi amenazó con ataques fuera de sus fronteras en caso de un injerencia externa, el anuncio de países como Francia, Estados Unidos, España y Noruega de participar en la intervención, así como de Bélgica, Italia o Reino Unido de ofrecer bases y material militar en el despliegue, ha frenado la iniciativa y el Gobierno libio ha decretado un alto el fuego ante el posible ataque aéreo de la coalición europea. Nuestro país ha puesto a disposición de la OTAN las bases de Rota y Morón.
Pero no todo son buenas noticias ante la intervención. Varios países europeos como Alemania, han mostrado su reticencia y podría quedarse a un lado, y luego Turquía tampoco se ha mostrado partidario de la intervención. En cambio, desde la OTAN se busca que se incorporen países árabes a la intervención, por lo que se ha recibido con gozo que Qatar se haya unido a los países de la coalición.
Y mientras Libia se prepara a este nuevo giro de tuerca, las protestas en otros países árabes continúan. En Yemen, donde parecía que se había apaciguado la protesta, se han producido más de 30 muertos cuando las fuerzas de seguridad y partidarios gubernamentales han abierto fuego contra los manifestantes. Además, en Bahrein, siguen las protestas contra los gobernantes del reinado. El entierro de uno de los activistas que falleció el pasado miércoles durante las protestas contra el rey Hamad ha concluido con protestas y gritos pidiendo su renuncia.
Ahora hay que ver cuáles son los siguientes pasos que da la ONU. El líder libio se ha adelantado y se muestra cauto. Las siguientes resoluciones serán clave.
Juan María Piñero
juanmaria@hispanidad.com