La cultura de las incapacidades laborales se había convertido en una especie de lotería. Hubo una época en la que el 10% de nuestros trabajadores tenían enfermedades que les impedían trabajar. Una gran bolsa de fraude realizada con el beneplácito de los médicos. La cosa choca de frente con un Gobierno que trata de incorporar al mercado laboral a personas con dependencia. ¿Con dependencia sí y con incapacidad no?
El caso es que el Gobierno se ha propuesto combatir el fraude. Y lo ha conseguido. Ha alcanzado acuerdos con las consejerías de Sanidad de las CCAA para acotar el fraude y el resultado es un recorte del 11% del gasto por incapacidad temporal, cerca de 500 millones de ahorro sobre los 3.500 presupuestados. Estamos muy orgullosos porque eso lo hemos hecho sin pérdida de los derechos de los que verdaderamente requieren esta prestación, señala Granado. De hecho, el índice de éxito en los casos de litigiosidad se mantiene estable en el 90%.
La segunda parte de esta campaña contra la 'incapacidad' es buscar la colaboración con las empresas. Porque Granado teme que detrás de las incapacidades existen problemas adaptativos o de condiciones laborales.