Sr. Director:

En unas breves líneas quisiera manifestar que el problema de las conductas antisociales no pienso que se deba a que carezcan de lugares donde reunirse, los jóvenes.

El que a los doce años ya están involucrados en el sexo cuando podrían ser mucho más felices disfrutando de la infancia o adolescencia con los juegos propios de esa edad. El uso abusivo de Internet, manteniendo diálogos con dudosos amigos, en lugar de dedicarlo a un deporte o a sanos paseos por el campo.

Los gastos desorbitados de un dinero que no tienen ni idea de lo que cuesta ganarlo. La impresentable televisión que tenemos, gestionada por adultos, que sólo lo son de nombre, ya que por lo que crean con frecuencia demuestran un gran vacío interior y proponen como modelo familias o modos de vida que pocas veces son las que deseamos para nuestros hogares.

Y quizá el factor más grave, es que algunos padres nos olvidamos de que los niños no son una decoración de la casa o alguien que nos molesta cuando queremos descansar.

Vicenta Barrera Jiménez

vicenta.barrera@barcelona.cepsa.es