En cualquier caso, los clientes se verán beneficiados

Gran escándalo se ha montado con la decisión de los organismos europeos de reducir las tarifas de ‘roaming', es decir el coste de llamadas en itinerancia fuera del país, cuando es casi obligatorio el uso de otra operadora. La verdad es que el cliente se verá beneficiado y eso siempre es digno de elogio, aunque las operadoras se quejen. Algunos precios, como por ejemplo al transmisión de datos desde el extranjero, alcanza cotas abusivas. Ejemplo, conectarse a Internet con un teléfono Movistar desde Alemania sale por 10 euros el mega.

Ahora bien, dicho esto, sorprende la decisión de los europarlamentarios, más que nada porque son los primeros beneficiaros de la reducción. Los diputados de Estrasburgo y los funcionarios de  Bruselas son adictos al teléfono, los grandes clientes de "roaming".

Y es que en esto de la economía no hay nada como ser juez y parte.