• La verdad es que no mandan nada, pero, en un hecho relevante, han reivindicado su presencia.
  • Lo cierto es que Juan Luis Cebrián manda más que nunca y que los bancos que le apoyan (Santander y Caixabank), así como Telefónica, ya son socios de la empresa informativa.
  • Tanto es así que la deuda de Prisa, que todavía precisa una refinanciación, no tendrá problemas para cerrar el ejercicio.
  • Eso sí, la línea ideológica del grupo sigue siendo muy progre, especialmente cristófoba, pero débil con el Gobierno Rajoy.    

Interesante hecho relevante el enviado por la familia Polanco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) durante la mañana del lunes. Aprovechando un cambio en las alianzas accionariales, los Polanco le recuerdan al todopoderoso Juan Luis Cebrián (en la imagen),  presidente y mandamás de la compañía, aunque no accionista de referencia, que controlan casi un 20% del capital (un 19,7%, para ser exactos) de los derechos políticos.

La verdad es que Janli Cebrián le importa un comino lo que digan los Polanco. No mandan y mientras cuente con el apoyo de Telefónica y de los bancos Santander y Caixabank, ahora accionistas de la compañía lo que digan los sucesores de Jesús Polanco le importa poco.

Es más, se admiten apuestas: no tendrán problemas para refinanciar (31 de diciembre) la deuda de la compañía, una deuda que, en otra circunstancias, si fuera otro el prestatario les habría conducido a la quiebra (llegó a supera los 6.000 millones de euros). Y todo esto, sin que la cuenta de resultados mejore.

Y la línea ideológica sigue siendo la misma aunque haya cambiado el objetivo a batir. Prisa sigue siendo ecoprogre y cristófoba -quizás una reiteración- pero ahora ya no apoya al PSOE y se muestra especialmente tímido con el Gobierno Rajoy. Vamos, que Prisa ha pasado de ser progre de izquierdas a progre de derechas.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com