Si la huelga no es un éxito, las centrales sindicales desaparecen

 

Los sindicatos están preparando una huelga salvaje. Ya han adelantado que el derecho a la huelga está por encima del trabajo porque está reconocida en la Constitución. ¿Es que no está reconocido el derecho al trabajo en la Carta Magna? Encima, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) se suma a la huelga y anuncia brazos caídos. Rubalcaba no responde. Al fin y al cabo, como informamos este jueves, hay un cierto compadreo entre Gobierno y sindicatos. Una especie de huelga de baja intensidad, de voladura controlada. O no, que diría Rajoy.

La huelga no será contra el Gobierno, pero paralizará el país. Así que los sindicatos están poniendo toda la carne en el asador para que no funcionen ni los transportes, ni los colegios -esenciales para la organización familiar- ni los periódicos -como ya hemos informado- ni los bancos  -o cierran o cierran, dijo el intelectual de UGT Andalucía-. Hasta los abuelos deben de estar de huelga, según el mismo intelectual. ¿Y luego? Luego nada porque todos saben que la huelga sólo sirve para dejar de cobrar un día.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com