En TVE, Joaquín Estefanía se refería a la muerte de Pinochet: es el dictador de nuestra generación. Lo hemos vivido muy compulsivamente y muy emocionadamente y lo que me gustaría es ver el final: aquellos monstruos todavía viven. El general Videla está vivo y coleando y comulgando todos los días. Saber que acaba esa pesadilla de la operación cóndor, Videla, etc.

 

Eduardo San Martín apostillaba a lo dicho por Estefanía que en mi generación hay dos dictadores que son Pinochet y Castro y espero que su muerte (la de Castro) provoque el cambio en aquel país tan querido para nosotros.

 

Y Lucía Méndez comentaba que lo que más ha sorprendido de la muerte de Pinochet es que fue un juez español quien le puso en un brete judicial y los españoles debemos alegrarnos, el juez Garzón, que tiene muchos otros defectos, pero ahí dio la talla, y los últimos años fueron para Pinochet con la espada de Damocles de la acción judicial.